martes, 30 de octubre de 2007

El Cuervo (de Edgar Allan Poe) -solo el final-

Y el cuervo, inmutable, continúa instalado allí, sobre el pálido busto de Palas, precisamente encima de la puerta de mi habitación, y sus ojos se parecen a los ojos de un demonio que sueña; y la luz de la lámpara, cayendo sobre él, proyecta su sombra en el suelo; y mi alma, fuera del círculo de esta sombra que yace flotante sobre el suelo, no podrá volver a elevarse. ¡Nunca más!





Simplemente tenía ganas de poner esto algún día.
El blog lo he renovado y tal. Eso quiere decir que le haré más caso algún dia de estos.

¿Por que tanto pinkfloydismo? Senzillamente vicio al puro arte de Waters, Gilmour y compañia. No se, ya se me pasará y tal.
En cierto momento ya actualizaré otra vez, y como es debido (lo que pasa es que aún esta en debate el porque de la creación de este blog, ya que ha cambiado con el tiempo).

Ahora a escuchar el Wish You Were Here