miércoles, 11 de julio de 2007

LAGRIMAS DE PERRO AZUL (el hombre que se daña a si mismo)


Realmente se convierte en un defecto demasiado vano el querer siempre abarcar el máximo de sabiduría o de benevolencia posible. Por naturaleza el hombre es imperfecto, abarcarlo todo supone querer llegar a la altura de Dios -y querer ser Dios supone herejia, locura y un sinfín de cosas-. El hombre no puede llegar nunca más allá de lo que, por lógica, "puede" ... por eso es necesario cortar con el hombre, "cerrar" al hombre.

La más grandes de las locuras ya esta presentada, querer dejar de ser lo que por naturaleza se ha sido siempre. Ahora bien, nadie lo va a hacer jamás.

DOLOR. He aquí lo unico que aporta al hombre dejar de serlo. Pero no me quiero dirigir a los hombres, yo quiero dirigirme a los "hombres" y por eso es tan importante dejar claro esta "ruptura". A aquellos a los que busco hacer llegar mi voz poco les importa este dolor, no es nada pues saben que este precio es tan pequeño que no llega ni siquiera a parecerse al precio más grande que deberán pagar.





LIBERTAD y esta vez no para todos, sino para cada uno. Al intentar liberar al máximo de gente posible en ocasiones se falla en el intento con demasiada frecuéncia. Lamentablemente para llevar a cabo el trabajo de acabar con el hombre hace falta ser egoista.

Una llamada a herirse mortalmente a uno mismo para poder acabar con lo que ya no es útil...
-tan extraño de ver como las lagrimas de un perro azul (natural, no teñido)-

lunes, 9 de julio de 2007

INADECUADO COMIENZO (el hombre que tropieza con si mismo)


T
odo fin tiene su principio. Asimismo comienzo mi propio final sin animos de encontrar nada más que lo que por mi mismo ya encontré -lo que queda por buscar esta en manos de los demás y oculto en lo más profundo de ellos-.


Inadecuado comienzo...¿por qué? Quizás todos los comienzos son siempre un poco inapropiados en todos los campos. ¿Acaso sabe el fumador lo que espera después de encender su primer cigarro? ¿Piensa en las negativas consecuencias de lo que le puede conllevar el beber a todas horas y porque sí el alcoholico? ¿Está el hombre seguro de si mismo JAMÁS? Quizás el mismísimo Dios se equivocó al crearnos libres y dejar que continuasemos nuestro camino solos, hiriendonos sin motivo alguno en más de una ocasión.



Poco apropiado... no, el momento es idoneo. Lo que pasa es que en ocasiones nos gusta dañarnos más de la cuenta.